HISTORIAS DEL DISTRITO. La calle General Oráa [I]
MIGUEL ROMERO MEMBRIVES , 14 de octubre de 2025
Dormimos nuestra vida con un sueño sin sueños. Pero, ¿dónde está nuestra vida? ¿Dónde está nuestro cuerpo? ¿Dónde está nuestro espacio?
George Perec, Lo infraordinario
La calle General Oráa nace entre el 52 y el 50 del paseo de la Castellana, y justo en ese punto tiene la mayor anchura excepcionalmente respecto a la mayor parte de su recorrido.
Hojeando los periódicos (1/2 julio 1880) ya se sabía que una de las nuevas calles de este ensanche (IIª fase) se le dedicaría al general. Se abre el 18 de julio (el 22 aún no se les ha puesto los carteles a esta y otras calles) y debemos esperar seis años para verla reflejada en un callejero.
Nace en Serrano y “acaba en el campo”, la actual Francisco Silvela. Su prolongación hasta la Castellana se debió realizar a principios del siglo XX (después de 1907).
Les propongo viajar en el tiempo usando un juego de espejos (una vieja foto de 1908). Si nos situamos, estamos en el paseo del Obelisco (Martínez Campos) y vemos allá al fondo el Obelisco de la Fuente Castellana (1833-1912) donde ahora está la estatua de Castelar.
Vista aérea del paseo de la Castellana y el monumento a Castelar.
Allá a lo lejos vemos a la derecha el Palacete de la Huerta “de Cánovas” (1880-1950); y arriba a la izquierda sobre ese horizonte en blanco y negro, el convento de las Dominicas de Santo Domingo el Real en Claudio Coello (allá fueron desde su primitiva ubicación cerca de Gran Vía y Callao).
Pero centrémonos sobre ese solar que existe a la izquierda del palacio y hasta la subida de aquella loma. Aquí comenzamos nuestro recorrido.
Fototipia de Hauser y Menet del monumento a Castelar. Edificio Castelar (abajo)
Del lado de los pares:
El actual 50 de paseo de la Castellana era un terreno que seguía siendo propiedad de Joaquín José de Osma, marqués de la Puente y Sotomayor (1812-1896), quien pidió licencias (1871) para la construcción de entrada de carros desde la futura prolongación de Narváez (Serrano), y (1871/1873) para poder levantar una verja y construir dos casetas en su huerta lindante con la Castellana. Posteriormente en él se alzó (1908) un precioso edificio que hubiera valido la pena conservar, el palacete propiedad del militar Leopoldo Sainz de la Maza y Gutiérrez-Solana (1879-1954) construido por Antonio Palacios y Julián Otamendi. Se podía acceder a él mediante el uso de rampas y unas escalinatas desde la vaguada que representa la Castellana. Una vez lo derribaron, sobre su solar se construyó el singular edificio Castelar (1977-1983) proyectado (1975) por Rafael de la Hoz Arderius, asistido por Gerardo Olivares James, que se pretendía fuera la sede del Banco Coca. Rafael de la Hoz parecía querer aprovechar la singularidad de la parcela dando una vuelta de tuerca arquitectónica. Diseñó este paralelepípedo de plantas cuadradas con doble piel de vidrio (rosado dentro y mateado en el exterior) para conseguir el efecto de que la estructura más visible pareciera un inmenso farolillo que levita sobre el terreno gracias a su magnífica base de cemento oculta a ojos vista. El tránsito hasta la Castellana se hace a través de una escalinata con rampa elaborado con travertino.
Tramo 6 al 8: era un solar (1907) que pertenece a José María de Palacio y Abárzuza (1866-1940), conde de las Almenas.
En el 6 de esta calle existió un taller de Miguel Rueda (1969-1971), modisto granadino que vistió a Paquita Rico, Lola Flores, e incluso a Carmen Martínez Bordiú (entre otras celebridades).
Con la prolongación de la calle (1907) se altera la numeración (también se derruyen edificios para construir otros y solares sin construir). Existió un 6 (que no sé ubicar) que bien pudo estar antes que el edificio cuya entrada se efectúa por Hermanos Bécquer 6 (1954) o entre Serrano y Claudio Coello. En 1920 se hallaba en construcción, momento en el que casi pierde la vida el joven Francisco Segovia, al arremeter sobre él uno de los dos bueyes que tiraban del carro que portaba el material de construcción. Se le fracturó la base del cráneo, lo que obligó a llevarlo de urgencia a la casa del Centro Cooperativo de Socorro de Guindalera. Debió ser un edificio más bien de gente humilde, quizás estilo corrala como otros del barrio. Podemos citar que en él residió Gerardo Gordo, quien trabajaba en fábrica de gaseosas “La Asturiana” en la calle Blasco de Garay 14.
Esquina a Serrano (81), obra del arquitecto Manuel Soler de Agustín, existe un conjunto de viviendas para Luis Sánchez Salvá (1935) que pudo construirse sobre el antiguo 8. En él se vendían sellos (sin valor postal) de ahorro, que eran de 5 céntimos y se agrupaban en cartillas para el ahorro. Entonces la única Caja de Ahorros.
10 (esquina Velázquez), solar de Manuel Pradillo; el 12 un solar de Lorenzo Baró; y del 14 hasta esquina a Claudio Coello un solar del conde de las Almenas.
Foto (1908) del inicio de General Oráa (izq.). Número 17 (antes 5) de la calle (abajo)
Del lado de los impares:
Haciendo esquina con Castellana en esta manzana existían un hotel del arquitecto José Manuel Espelius y un terreno de José Díaz García. En fotos antiguas de Hauser y Menet se observa que en esa esquina existió un bello edificio (que sigue viéndose en fotos aéreas de 1960). Delante de él un tranvía, casi seguro el 223, y la estatua dedicada a Castelar (1908). Quizás fuera aquel hotel de José Manuel Espelius y hayamos perdido una reliquia de aquel gran arquitecto que como otros configuraron el Madrid que conocemos. Posteriormente sobre ese solar se construye el edificio de oficinas (1977) diseñado por los arquitectos Federico Echevarría Saiz, Horacio Domínguez López y Javier Maruri Aranzadi.
3–5: sobre un gran solar que pertenecía al conde de las Almenas y otro con una proporción ínfima (justo la esquina a Hermanos Bécquer) del marqués de Santo Domingo; dos edificios de arquitectura residencial (1920 y 1928) ideados por el arquitecto Antonio Rubio Marín. Los edificios parecen estar rematados por grandes aleros de madera, y diferenciando el primero con unos miradores ondulantes. El más llamativo es el esquinado, que cuenta con un torreón cilíndrico que asemeja según quien lo mire un palomar o la capilla Pazzi. Encontré un cerillero de Restaurante Grill Brasserie, un posavasos de un pub denominado Sunset que estaba ubicado en el 5 que pasaría a denominarse New Sunset (1970). Desde 2007 es el restaurante José Luis.
Prosigamos: este tramo se denominó calle de Vicente López según el mapa de González Iribas (1906), entre Diego de León (así se denominaba entonces Hermanos Bécquer) y Serrano. Vicente López (1772-1850) fue un pintor valenciano de renombre que fue elegido por Fernando VII antes que al magnífico Maella y el grandísimo Goya.
Este tramo (7 al 11 actuales) perteneció al conde de las Almenas, José María de Palacio y Abárzuza.
9: la vivienda creada para Jerónimo López de Ayala (1862-1934), la casa–palacio del conde de Cedillo (1921) del arquitecto Eduardo Gambra Sanz, que parece un precedente claro de lo que hará nuestro vecino Gutiérrez Soto con marcado sello herreriano si se hubieran respetado sus planos originales. Los dos torreones rematados por chapiteles y bolas evocan El Escorial y el Palacio del Buen Retiro. Aquí vivió posteriormente el marqués de Lozoya, Juan de Conteras y López de Ayala Thomé y del Hierro (1893-1978). Al parecer disponía de una biblioteca muy valiosa. También estuvo un tiempo alquilado Ramón María del Valle Inclán (1924), con su mujer y sus hijos, dado que no tenía para más. Era una estancia con dos cuartos, uno para dormir y otro para escribir.
11 (esquina a Serrano 83): la residencia de las RR MM Dominicas de la Anunciata, un edificio brutalista (1975) ideado por el arquitecto Francisco Coello de Portugal Acuña.
Como recordaremos nuevamente, el inicio de la calle hasta 1907 comenzaba en Serrano. En su esquina existió un solar de Manuel Pradillo.
15 (entonces 3): el laboratorio de Medinaveitia, ahora (2012) Centro de Vacunación de la Comunidad de Madrid
17 (el 5): la vivienda de Luis Simarro después pasa a ser un convento de Teresitas; parece ser que existió una droguería propiedad de Raimundo Esquerda (1920) y en él se celebró por vez primera Casa Decor (1992).
19: en el solar, de Mª Antonia Ramos, se construyó un nuevo edificio (1900).
Termino aquí solitario, después de hacer iniciado el zurcido del habitar de mi calle, justo en la esquina de Claudio Coello.