JMD SALAMANCA. Febrero 2019.
El compromiso vecinal con el medio ambiente en nuestro distrito se pone de manifiesto con la puesta a punto de proyectos como el Huerto Vecinal Sancho Dávila, inaugurado en mayo de 2018 en la calle de Sancho Dávila esquina a la calle del Marqués de Zafra, que desde su apertura viene ofreciendo un espacio de colaboración, enseñanza y aprendizaje sobre el cuidado y la preservación del medio ambiente urbano. Desde su instalación se han programado talleres, formación y actividades participativas en las que grandes y pequeños han ido aprendiendo y disfrutando.
El sábado 12 de enero se ha hecho realidad la propuesta financiada a través de los Presupuestos Participativos 2017 consistente en la instalación de unas composteras en el huerto vecinal, construidas por la Asociación RBK Art. Se entregaron también unos cubos marrones para el reciclado doméstico de la basura. En la inauguración, los representantes del primer proyecto de compostaje comunitario de Hortaleza hablaron de su experiencia sobre la obtención de compost.
Una compostera trilliza
El compost, es decir, el abono orgánico natural destinado al abono de la tierra para el cultivo de las plantas, las hortalizas y las verduras se elabora en el huerto vecinal en una compostera denominada “trilliza” porque contiene tres cubos de 1 m3 cada uno, en los que se transforman los restos orgánicos provenientes de restos de la basura doméstica, como las peladuras de frutas y verduras, las cáscaras de huevo o los posos de café que previamente se depositan en unos cubos marrones distribuidos entre la vecindad.
La instalación se completa con un contenedor para echar estructurantes, como son restos de ramas y hojas de los árboles, que funciona como el serrín para evitar la humedad. El proceso de obtención del abono natural se completa al cabo de un mes destinándose al cultivo y cuidado del huerto urbano.