CARLOS RODRÍGUEZ EGUÍA. Octubre 2018.
Por iniciativa de la Biblioteca Nacional de España (BNE), la Asociación Clásicas y Modernas (ACyM) y la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE), desde 2016 se celebra anualmente en España el Día de las Escritoras. Para la celebración, se ha elegido el lunes siguiente al 15 de octubre, festividad de la escritora Santa Teresa de Jesús.
En el siglo XX, las escritoras comienzan a ser más conocidas por su nombre.
Se pretende que la aportación de escritoras españolas e hispanoamericanas a la literatura sea más visible, que las obras que publiquen se conozcan por el nombre real de la autora, sin necesidad de seudónimos, que durante tanto tiempo ocultaban el verdadero nombre. Ni estaba bien visto ni se consideraba mencionable que una mujer escribiera un libro. Ocurría en el siglo XIX, cuando aún se creía que educación y cultura eran cosas de hombres. Durante siglos, diccionarios e historias de la literatura han ignorado a las escritoras. Si se las ha mencionado, ha sido con un seudónimo, que siempre era nombre de varón.
En el siglo XX, las escritoras comienzan a ser más conocidas por su nombre. Se publica su obra, tanto poética como narrativa. Se reconoce la aportación de algunas a la literatura y a la cultura en general. Son las que abren caminos a otras mujeres, que también quieren publicar. Pero sus méritos no se han reconocido debidamente, como prueban los premios conseguidos. El premio literario español de mayor categoría, el Cervantes, se ha concedido desde su creación en 1976 hasta 2017 a 38 escritores y a 4 escritoras. A María Zambrano en 1988, a Dulce María Loynaz en 1992, a Ana María Matute en 2010 y a Elena Poniatowska en 2012. También los escritores obtienen más premios que las escritoras en las diferentes especialidades de la literatura en lengua española: ensayo, narrativa, teatro, etcétera.El 22 de octubre de 2018 se leerán en la BNE, al igual que en años anteriores, textos de escritoras. Laura Freixas, presidenta de ACyM, ha resaltado la necesidad de actos de este tipo, mientras exista tanta desigualdad en la apreciación de la labor cultural de la mujer frente a la del hombre. No ocurre solo en la literatura, sino también en otros aspectos: cine, arte, etc. Además de la discriminación laboral y social.
Una vez más, se recordará el multicolor Día de las Escritoras. Como decía la española Gloria Fuertes: “Todos los días son blancos, todas las noches son negras y las tardes son azules y las mañanas son menta”. De la argentina Arjona Delia son estos versos: “Como águila en plano vuelo, / que se eleva al horizonte, / voy dibujando en el cielo, / barriletes de colores”. Esta escritora expresa sus sentimientos en la poesía, queriendo darse a conocer como ella es: “Cuando escribo me libero, / lo que siento siempre expreso / y mi pluma, les confieso / es mi mejor mensajero”. Tal vez, conociendo el mundo literario creado por las escritoras, pueda haber mejor comprensión mutua entre hombres y mujeres, caminando juntos, para que al lado de un gran hombre haya una gran mujer y a la inversa. Ni delante ni detrás. Sin misoginias ni fobias que infectan las relaciones humanas y contribuyen a discriminar.